¡Desde que nace!
Al nacer, si todo va bien, nos ponen al bebé en nuestro pecho para iniciar el piel con piel y favorecer el inicio de la lactancia. ¡y aquí ya está en prono!

Le llamamos postura de crianza biológica y si quieres dar el pecho, ¡es una de las mejores posturas para el inicio de la lactancia!

Es la mejor posición para empezar a poner a tu bebé boca abajo. Túmbate, ponte a tu bebé encima y ¡disfrutad los dos! Os servirá de relajación, de conexión entre ambos y al bebé además le ayudará en su desarrollo.

¡Déjale que se chupe las manos!

A partir del segundo mes de tu bebé, verás que empieza a meterse las manos en la boca. Esto lo hace porque se les está descubriendo. Luego se las cogerá entre ellas y se las empezará a mirar.

¿Y por qué primero a la boca?

Pues porque la boca es la zona que más sensibilidad tiene en el recién nacido, así que por eso la usan para explorar. Luego complementarán la informa­ción con la vista y con el tacto pero mientras que estos dos sentidos maduran, la boca es la que más información ofrece al cerebro.

Cuando se chupa alguna parte de su cuerpo está integrándola por partida doble ya que al cerebro le llega información a través de la boca sobre cómo es aquello que está chupando, y la parte del cuerpo que está siendo chupada está siendo estimulada gracias a que está siendo tocada (como hablamos en el post anterior)

Sabiendo todo esto:
– Procura que tu bebé tenga la mayor parte del tiempo posible las manos y los pies al aire
– Deja que se chupe las manos y, posteriormente, los pies
– No le prohibas que chupe las cosas, procura siempre un entorno limpio (no en exceso) y seguro para que tu peque pueda chuperretear lo que encuentre a su alcance.

El principal signo de un mal agarre es que sientas dolor cuando tu bebé enganche el pecho o durante la toma.

Para un buen agarre es necesario que el bebé abra bien la boca, extendiendo su cabeza ligeramente hacia atrás y que enganche no sólo el pezón sino gran parte de la areola.

Otros signos de un mal agarre son el callo de succión en el labio superior del bebé y que al finalizar la toma el pezón esté en forma de barra de labios y/o muy blanco y aparezcan grietas.
Durante la toma no deben escucharse chasquidos, no deben salirle hoyitos al bebé en sus mofletes, la nariz y el mentón del bebé deben estar en contacto con el pecho, sus labios deben estar evertidos y debe existir una línea recta imaginaria que una la oreja, el hombro y la cadera del bebé.

La disquecia consiste en una falta de coordinación a la hora de defecar por la propia inmadurez del bebé.

Aprietan y se ponen muy rojos pero no consiguen defecar ya que en vez de relajar el ano lo aprietan y cierran. Cuando consiguen relajarse hacen caca y son blandas. No suelen pasar muchos días sin defecar. Ocurre los primeros meses de vida, muy común durante los dos primeros meses y menos de los 2 a los 6 meses, cuando ya consiguen coordinar.

El estreñimiento es un retraso en la defecación de varios días. No hay un consenso que considere el número normal de días que puede estar un bebé o niño sin defecar, pero si pasan varios días y cuando consigue defecar, las cacas son duras y les provoca dolor se considera estreñimiento. Durante los 6 primeros meses las cacas no deben tener forma, deben ser siempre entre líquidas y blandas. Cuando empiezan con la alimentación complementaria pueden empezar a salir con algo de forma pero deben seguir siendo blandas y recurrentes.

Es importante que le valore su pediatra y fisioterapeuta pediátrico/a. En casa, vigila que cuando duerma o pase ratos bocarriba no apoye su cabeza sobre el lado en el que tiene el aplanamiento (que no mire hacia ese lado).

Estimúlale para que mire hacia el lado que mira menos, usa un buen sistema de porteo y cógele mucho en brazos para que no pase mucho tiempo apoyado/a sobre el lado plano, los huesos de su cabeza no crecerán por las zonas por las que reciben mucha presión. Evita el uso de hamacas y ponle a jugar boca abajo muchos ratitos al día

La recomendación para la prevención del síndrome de la muerte súbita del lactante (SMSL) es que los recién nacidos duerman boca arriba. Pero pasar mucho tiempo boca arriba en la misma posición es uno de los factores más frecuentes que causan plagiocefalia (deformidad craneal). Es por esto por lo que cuando el bebé esté boca arriba hay que controlar que vaya alternando ratos mirando hacia ambos lados y para arriba. Si notas que tu bebé siempre mira para un lado seguramente haya alguna alteración musculoesquelética que le esté impidiendo mirar hacia el otro lado. Y si siempre mira hacia arriba igual sería conveniente usar un cojín específico para prevenir la plagiocefalia, consúltalo con tu pediatra o fisioterapeuta pediátrico.

 Cuando el bebé ya realiza volteos hacia ambos lados ya puede dormir en la postura que desee, cuidando siempre que no haya ningún elemento en su cuna o cama que le pueda provocar asfixia.

Dependiendo de la causa por la que no haga caca la fisioterapia podrá ayudarle más o menos pero generalmente sí.

En consulta podemos valorarle y tratarle y os daremos herramientas y ejercicios para hacer en casa.